
Capitán América: Un nuevo mundo es una película que logra mantener el interés sin sobresalir de manera espectacular. Sam Wilson, interpretado por Anthony Mackie, demuestra que está listo para asumir el icónico papel del Capitán América, ofreciendo una interpretación sólida y auténtica. Si bien la trama es entretenida, con una conspiración global que mantiene el suspenso, el desarrollo de los eventos es algo predecible y, en ocasiones, lento.
La película no arriesga demasiado, lo que la hace fácil de ver pero sin momentos memorables que marquen un antes y un después en el universo Marvel. La única escena post-créditos puede decepcionar a algunos, ya que no ofrece grandes revelaciones, pero es un buen detalle para los fanáticos.
En resumen, Capitán América: Un nuevo mundo es un filme que cumple con su propósito de entretener, pero no deja una huella tan fuerte como otras entregas. Sam Wilson se gana su lugar como el nuevo Capitán, aunque la película podría haber ofrecido algo más.