
El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, ha desencadenado una profunda reestructuración en el gobierno tras destaparse un escándalo de corrupción a gran escala. El fiscal general de Ucrania, Andrei Kostin, presentó su dimisión este martes luego de que Zelensky lo acusara de permitir un alto número de «falsas bajas» para evadir el servicio militar.
La decisión del presidente se produjo tras una reunión del Consejo de Seguridad Nacional, donde se reveló que diversas comisiones regionales habían emitido certificados médicos falsos para eximir a ciudadanos del servicio militar, a cambio de sobornos. Estos hechos han generado una gran indignación en Ucrania, que lucha contra una invasión rusa desde hace más de un año y necesita el apoyo de todos sus ciudadanos.
«Considero absolutamente correcta la posición del presidente Zelensky en cuanto a que no solo se deben anular todas las decisiones ilegales relativas a la concesión de bajas, sino también la responsabilidad de personal»
Afirmó Kostin en su comunicado de renuncia.
Este escándalo ha sido un duro golpe para la moral nacional ucraniana, que se encuentra luchando en una guerra de desgaste contra Rusia. La corrupción ha sido un problema endémico en Ucrania durante años, y este caso ha puesto de manifiesto la necesidad de una reforma profunda en las instituciones del país.
Para hacer frente a esta crisis, el presidente Zelensky ha ordenado la disolución de las comisiones médicas responsables de evaluar las bajas para el servicio militar a partir del 31 de diciembre. Además, ha instruido al Ministerio de Salud y a otras instituciones relevantes para que establezcan nuevos mecanismos de evaluación más transparentes y eficientes.