
Este jueves se conmemora el décimo aniversario del trágico caso Ayotzinapa, que será recordado con marchas y protestas en la Ciudad de México y otras ciudades del país. A solo cinco días del fin del sexenio de Andrés Manuel López Obrador, la fecha representa un epílogo marcado por la polarización y las intensas discusiones legislativas en torno al Poder Judicial y la Guardia Nacional.
El caso Ayotzinapa, que involucra la desaparición de 43 estudiantes rurales a manos de un entramado criminal con complicidades estatales, sigue siendo un doloroso recordatorio de la violencia en México. En una década, las familias de las víctimas han enfrentado la angustia de no recibir noticias significativas, más allá de algunos restos humanos hallados en distintas localidades. Este silencio se ve acentuado por los intentos de las autoridades por ocultar la verdad, especialmente durante el mandato de Enrique Peña Nieto
López Obrador, quien asumió el compromiso de resolver el caso, se enfrenta a un dilema: las investigaciones han impactado a sus aliados, las Fuerzas Armadas, lo que ha limitado la independencia de los investigadores. Su defensa radica en las pruebas destruidas y los testigos que han perdido la vida, sumando una larga lista de autoridades procesadas a distintos niveles.
A diez años de la tragedia, la situación de inseguridad en México permanece crítica. La violencia sigue en aumento en varias regiones, con episodios sangrientos que apenas se informan en los medios. Según una encuesta reciente, la inseguridad sigue siendo una de las principales preocupaciones de la ciudadanía, evidenciada por los recientes enfrentamientos en Culiacán y otros estados como Puebla y Guanajuato.
La conmemoración del aniversario también subraya el dolor de un país que enfrenta más de 30,000 asesinatos anuales y un vasto colectivo de víctimas. Aunque el caso Ayotzinapa no se resuelva por completo, ya es conocido que Guerreros Unidos, el grupo responsable del ataque, contaba con una amplia red de apoyo institucional.
La futura presidenta, Claudia Sheinbaum, asumirá el cargo el 1 de octubre, heredando un Estado marcado por la necesidad de una reforma integral de las fiscalías. La creación de la Guardia Nacional no garantiza el control territorial, como se evidenció en la noche de Iguala. El verdadero desafío será dar sentido a ese control en un contexto de creciente impunidad y desconfianza hacia las instituciones.
Hoy se conmemoran 10 años de la desaparición forzada de los estudiantes de la Normal Rural "Raúl Isidro Burgos" de #Ayotzinapa.
La CNDH en 2015 participó en la simulación y en la opacidad del caso.
— CNDH en México (@CNDH) September 26, 2024