
En el área metropolitana de Nuevo León, los homicidios en domicilios se han convertido en una práctica común, reflejando un preocupante aumento de la violencia. En los últimos meses, los homicidios dolosos han incrementado notablemente, con una tendencia alarmante hacia el asesinato dentro de las viviendas de las víctimas.
Durante los últimos diez días de julio, se registraron aproximadamente 40 homicidios en la región, de los cuales 18 ocurrieron en las casas de las víctimas. Entre los casos más destacados, el martes se produjo un triple homicidio en la colonia Monterreal, municipio de Escobedo. Tres hombres que se encontraban en una reunión en su hogar fueron asesinados por sujetos armados que irrumpieron en la vivienda.
Otro incidente ocurrió el domingo en la colonia Los Valles, municipio de Juárez, donde una pareja fue atacada a balazos mientras conversaban en la banqueta de su casa; el hombre murió debido a los impactos. Además, el 17 de julio en la colonia Sierra Ventana, un padre y su hijo de dos años fueron asesinados a balazos mientras estaban en la cochera de su casa por dos individuos en motocicleta.
Hasta el miércoles, el estado de Nuevo León reporta un total de 928 homicidios, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. Javier Navarro, secretario general de Gobierno, aseguró que algunos de estos hechos delictivos están dirigidos principalmente a grupos específicos y no representan una amenaza generalizada para la seguridad de los ciudadanos.
«No es nada que esté subiendo o causando un problema con la seguridad de los ciudadanos. No hay una violencia con los ciudadanos»
Desde principios de año, el Gobierno federal ha intensificado los esfuerzos para mejorar la seguridad en Nuevo León, enviando dos convoyes de 300 elementos cada uno del grupo especial Fuerza de Tarea Regional, el primero el 15 de abril y el segundo el 21 de julio. Estos equipos han estado trabajando en coordinación con las autoridades municipales y estatales.
Uno de los principales desafíos para las autoridades es el modus operandi de los delincuentes, que recuerda al “Estilo Colombiano” de los años 90, donde los sicarios se desplazaban en motocicletas para cometer los crímenes. Este método permite a los agresores una mayor movilidad en las estrechas calles de las colonias donde ocurren estos delitos. De hecho, en el ataque del martes que dejó siete víctimas en domicilios, seis de los presuntos criminales utilizaron motocicletas para moverse.