
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha emitido una advertencia preocupante sobre la aparición de un brote epidémico de una nueva cepa de viruela del mono en la República Democrática del Congo. Conocida como mpox, esta enfermedad está causando alarma debido a su mayor letalidad en comparación con las cepas anteriores.
El director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, destacó en una conferencia de prensa la gravedad de la situación, señalando que la nueva cepa del virus ha propagado preocupación desde septiembre pasado. Hasta la fecha, se han registrado 11,000 casos y 445 muertes relacionadas, con los niños como los más afectados por la enfermedad.
El mpox, que se transmite principalmente por contacto cercano con personas o animales infectados, así como por objetos contaminados, se caracteriza por erupciones cutáneas y síntomas similares a los de la gripe, como fiebre y dolor de garganta.
La nueva cepa identificada recientemente, denominada clado Ib, se ha destacado por ser transmitida también por contacto sexual, ampliando aún más sus vías de contagio.
Inicialmente identificada en simios en 1958 y luego en humanos en 1970, la viruela del mono ha persistido principalmente en regiones de África central y occidental. Sin embargo, brotes recientes en otros continentes han destacado la globalización como factor de su propagación.
A pesar de los esfuerzos previos de control y la declaración de emergencia de salud pública internacional en 2022, el nuevo brote subraya la necesidad continua de vigilancia y respuesta efectiva para contener la enfermedad. Actualmente, no existe un tratamiento específico aprobado para el mpox, aunque se utilizan antivirales y la vacuna contra la viruela humana ha mostrado cierta eficacia.
La OMS insta a la comunidad internacional a fortalecer la vigilancia epidemiológica y apoyar los esfuerzos de control en las áreas afectadas para prevenir una mayor propagación y mitigar los impactos en la salud pública global.